El producto se coloca en bandejas de ionización de dimensiones 100 x 120 cm y se mueven sobre un transportador que transcurre dentro de una celda de irradiación hasta la zona de tratamiento. En este punto, el producto es sometido durante unos segundos al impacto de los electrones generados por el acelerador de electrones. Los parámetros de tratamiento serán únicos para cada producto y se definen en una etapa previa denominada cualificación del comportamiento funcional.
Tratamiento por Radiación Beta
Los electrones generados por el acelerador tienen una energía de 9,8 MeV +/- 2%.
El sistema transportador lleva al producto a través de la celda de irradiación hasta la zona de tratamiento, donde es expuesto al haz de electrones con una velocidad previamente definida según la dosis requerida y la naturaleza del producto.
Generalmente, el tratamiento se lleva a cabo con voltéo en dos pasadas : un para cada lado del producto.
La dosis absorbida por el producto depende de los siguientes factores:
- la intensidad y la energía del haz de electrones
- la velocidad de paso bajo el haz.
- la composición y la densidad de los materiales.
Disponible en las plantas de Chaumesnil y de Tarancón (España)
El haz de electrones que genera el acelerador de partículas permite obtener electrones de alta energía (10MeV), con gran capacidad de penetración.
El tratamiento es continuo y rápido, el tiempo de exposición a la radiación es de escasos segundos.
La dosis absorbida por el producto se mide en kiloGray (kGy), la cual es inversamente proporcional a la velocidad de paso bajo el haz de electrones.
En la práctica, la velocidad del transportador y la intensidad del haz, son los únicos parámetros de proceso a ajustar una vez hecha la cualificación del comportamiento funcional.
Es un tratamiento seguro y reproducible.
La automatización y la trazabilidad del proceso garantizan la reproducibilidad y seguridad del tratamiento.
Es un proceso físico en frío, sin residuos y sin cuarentena.